La hipertensión arterial, esto es, la enfermedad definida por unas cifras de presión sanguínea superiores a 140/90 mmHg, constituye, como alerta la Organización Mundial de la Salud (OMS), la primera causa de mortalidad global. No en vano, hasta un 75% de la población con hipertensión –en torno a 1.100 millones de personas en todo el mundo y más de 14 millones de españoles– presenta un riesgo nada desdeñable de sufrir un ictus, un infarto de miocardio o de desarrollar enfermedad renal.
Pero, ¿qué se puede hacer para bajar la presión sanguínea? Pues adoptar un estilo de vida saludable y, llegado el caso, seguir un tratamiento. Sin embargo, y aún a día de hoy, la mitad de los afectados que toman fármacos para bajar esta presión arterial no lo consiguen. De ahí la importancia de un nuevo estudio llevado a cabo por investigadores del Instituto George de Salud Global en Sídney (Australia), en el que se muestra cómo una combinación de cuatro fármacos a dosis bajas logra el control de la presión sanguínea en el 100% de los pacientes.