SANTO DOMINGO. Francisco Domínguez Brito ha hecho una vasta carrera como servidor público, dándose a conocer como fiscal del Distrito Nacional con apenas 31 años de edad.
Aunque le ha dedicado menos tiempo al trabajo político que al de servidor público, también es un dirigente político que ha aspirado ya en dos ocasiones a la candidatura presidencial del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
En conversación con Diario Libre, Domínguez Brito cuenta sus preocupaciones por la situación de su partido, al cual le critica que solo esté operando como una maquinaria electoral en las campañas políticas.
—¿Cómo evalúa la situación del PLD?
Yo creo que lo primero, ahora que estamos muy lejos de las elecciones el PLD debe concentrarse en la reformulación y en el cumplimiento de una serie de medidas que se acordaron en los diferentes congresos.
Es vital en este momento retomar desde los municipios hasta las provincias en sentido general todo lo que es la estructura orgánica, la reorganización de los comités de base, de las direcciones medias, el establecimiento de las direcciones medias alrededor de los centros electorales.
También la dirección por parte del partido de cómo debe de ser la estructura y no una estructura que se fue creando en función de la misma dinámica y de un crecimiento de la militancia.
Eso fue positivo hubo mucha pasión, mucho ánimo, mucha gente que se inscribió y se fue haciendo alrededor de esos líderes locales, ahora, la organización no puede ser alrededor de líderes locales, tienen que ser alrededor de las mesas electorales porque ya son muchos los líderes locales y tenemos que llevarlo a cabo a los a fines de que nos permita ser mucho más eficientes, no solamente en el proceso electoral sino también retomar el partido como una estructura política, que es la segunda gran reforma que le conviene al PLD.
Cuando nació el PLD las estructuras municipales y barriales, no solamente eran un componente electoral sino que tenían un componente político, social y comunitario.
Yo creo que es vital en este momento que las direcciones medias y las estructuras en los barrios y los municipios retomemos todo lo que es esa agenda política directamente con la comunidad, me refiero a temas tan fundamentales como la educación, incorporarnos en la promoción de que las asociaciones de padres jueguen roles fundamentales en el desarrollo de esa revolución educativa.
Seguridad ciudadana, estar pendiente de nuestros muchachos, nuestros adolescentes, medidas de prevención de consumo de drogas, estoy hablando de que ya el partido vuelva de nuevo a ser lo que era antes que trabajaba con sindicatos o juntas de vecinos, que volvamos a este tema donde veamos el ambiente y donde veamos qué rol podemos jugar en la comunidad.
Creo que la segunda gran revolución partidaria es, paradójicamente volver a un pensamiento de que la estructura del PLD no puede ser solamente una estructura electoral, no puede ser solamente una maquinaria electoral, sino que tiene que volver a ser una maquinaria política alrededor de las áreas en las cuales se mueve.
Yo diría que estos dos años que se avecinan tienen que concentrarse en nuestro partido en ese doble rol de reestructuración como maquinaria electoral y reorientación de nuestras participaciones políticas como una maquinaria social, política, educativa, de transformación cultural en las comunidades en las cuales se desenvuelven estas estructuras.
—La gente se pregunta, ¿cuándo vuelve a sacar del folder su proyecto político?
Yo no tomaría ninguna decisión en este momento sobre si lanzaría un proyecto presidencial, por ahora yo creo que es un gobierno muy joven, tenemos que concentrarnos en el trabajo.
En este momento yo tengo mucha responsabilidad en el Ministerio de Medio Ambiente, aunque esto me permite mayor libertad política, no es menos cierto que mi responsabilidad es concentrarme en estos grandes planes.
El Presidente ha declarado el cuatrienio del agua, el año del desarrollo agroforestal, nunca como antes se le había dado tanta importancia al medio ambiente. El presidente Medina y nuestro Gobierno están concentrados en ello, y creo que estos años que vienen es para concentrarnos en eso, yo llevaré a cabo un proceso de reflexión y en el momento indicado, a los fines de determinar si tomo la decisión de lanzar un proyecto presidencial.
—¿Cómo ve las protestas actuales contra la impunidad?
Hemos avanzado mucho en los mecanismos de control, la gran debilidad que hay en el sistema de lucha contra la corrupción es que el régimen de consecuencias es muy frágil, aquí una gente se puede llevar mil, dos mil millones para su casa y las sanciones han sido mínimas, y yo creo que aquí hay una responsabilidad colectiva de todos y también hay otros actores que tienen mayor responsabilidad que otros, yo no entiendo cómo gente puede enriquecerse con yates, con aviones, con helicópteros con todo y al final se van diluyendo y no hay las sanciones correspondientes.
Yo creo que ese es el gran problema de la lucha contra la corrupción, el régimen de consecuencias.
—¿Es necesario un fiscal especial para el caso Odebrecht?
Yo creo que no, el Procurador está haciendo el esfuerzo, hay muchos casos en los que se han hecho esfuerzos, lo importante para mí es si alguien se enriqueció, que haya sanción. Si usted fue muy hombre para hacerse rico sin su trabajo, bueno pues que sea buen hombre para ir a la cárcel, yo creo que eso es una regla.
—¿Dónde se ha sentido mejor como servidor público?
Yo no sé si por ser la primera, pero indudablemente que la Fiscalía del Distrito Nacional. Yo tenía 31 años, fue mi primera experiencia pública, sobre todo trabajaba mucho con la gente, en los pasillos, en las comunidades.
Fue una gran experiencia, tal vez la más bonita que yo he vivido. No te niego que ahora me siento bien también. Disfruto, estoy apasionado con lo que hago, pero también en el Ministerio de Trabajo fue diferente, pero era definiendo políticas, era apasionante para mí también. Yo disfruto cada actividad que hago.
—Diversos sectores están apostando a que la regulación del financiamiento de los partidos sea la clave para evitar la corrupción. ¿Qué opina usted?
No es la clave, pero hay que retomar la Ley de Partidos Políticos. Y pienso que el mejor mecanismo no es el control del ingreso de los fondos a los partidos políticos, el mejor mecanismo es el control del gasto. El control del ingreso hay que intentarlo, hay que regularlo, sin embargo en sociedades como la nuestra es más difícil.
Yo no lo descarto, creo que tenemos que poner mucha atención. No significa eso que dejemos de prestar atención a la mejor forma que es el control del gasto. Hay que limitar una dinámica que se va llevando a cabo que va a obligando a los partidos políticos a hacer gastos innecesarios.
Tú no puedes tener una precampaña durante tres años llenando de afiches, llenando de anuncios de televisión, yo creo que eso tiene que ser limitado a un tiempo determinado. La colocación de propaganda también. Hay que establecer parámetros para el gasto de los partidos políticos y de las candidaturas, eso ayudaría mucho a todos los procesos.
Hay otra parte que nosotros no podemos dejar de lado en la Ley de Partidos y es el tema de la democracia interna en los partidos. Uno de los graves problemas que tiene el sistema político está en la democracia interna.
Los cuadros políticos en este momento, los que han dado la vida entera en política se pueden ver desplazados por cualquier persona que tiene dinero rápido, la política seria, de tradición, de la gente que se entrega y que lo lleva en la sangre, cualquiera de ellos es desplazado inmediatamente por alguien que tiene mucho dinero.
Eso se debe a que se generan mecanismos clientelares y populistas dentro de los partidos donde estas personas ocupan la primacía. Yo creo que todo el mundo tiene derecho, pero no me parece que sea el dinero el que debe determinar que alguien llegue o no.
Ahora mismo, la democracia interna en los partidos no está muy clara. Urge y hay propuestas de que la Junta Central Electoral sea árbitro en los procesos internos.
Los partidos políticos no son un sujeto jurídico, solamente de derecho privado, creo que hay muchos planteamientos de que también son sujetos de derecho público y en consecuencia pueden ser regulados por la Junta Central Electoral, sobre todo los procesos donde se van a determinar cuáles son la autoridades y las candidaturas.
Hemos visto las dificultades en estos procesos internos, ojalá sea todo el mismo día, todos los partidos políticos, que no haya duplicidad de gente que vote en todos los partidos en procesos diferentes, que sea participativo y que verdaderamente podamos llevar una revolución a lo interno de los partidos en las democracias.
—¿Hay que eliminar el voto preferencial?
El problema es que el voto de arrastre, siempre y cuando sea democráticamente electos los diputados, pudiera tener un sentido, pero si es para que los partidos hagan listas cerradas entonces ponen en los listados a número uno o dos a personas que tal vez no fueron a buscar los votos en las bases entonces no estamos haciendo nada.
Hay otra posibilidad que se ha planteado y es que sean los votos uninominales y bajar las circunscripciones, es decir que en vez de 10 candidatos de cada partido vaya uno de cada uno y gane el que ganó ahí. Esa es sumamente interesante, porque le permite al candidato a diputado estar más cerca de su comunidad, y no se da la guerra que se da en un mismo partido.