No importa qué concentración tenga ni qué volumen de bebidas alcohólicas consumas: tomar alcohol, cualquier tipo y cualquier cantidad, daña el cerebro, de acuerdo con una investigación de la Universidad de Oxford.
Aunque existe la creencia de que las bebidas con menor porcentaje de alcohol o consumirlas moderadamente puede ser menos dañino para la salud, lo que descubrieron los expertos ingleses durante un estudio que realizaron por 30 años, es que no importa la cantidad ni el tipo de alcohol que se tome, de todos modos el cerebro resiente sus efectos.
El área del cerebro más afectada por el alcohol suele ser el hipocampo, encargado de la orientación espacial y la memoria, y la edad recrudece el problema.
Los investigadores de Oxford monitorearon durante 30 años a 527 hombres y mujeres con una edad promedio de 43 años al inicio del estudio. Todos fueron sometidos a resonancias magnéticas continuas y ninguno reportó beber alcohol en exceso.
Como resultado, la investigación encontró que al paso del tiempo, incluso quienes bebían alcohol moderadamente presentaron algún nivel de año cerebral estructural, como atrofia del hipocampo y una menor densidad de la materia gris, lo que desencadenó deterioro cognitivo y disminución de la fluidez léxica (lenguaje).
Los participantes varones consumieron, en promedio, 11.5 unidades de alcohol a la semana, mientras las mujeres bebieron 6.4 unidades semanales. Y aunque sí observaron un mayor riesgo de daño en quienes consumieron más alcohol, encontraron que el daño al cerebro ocurre independientemente de la cantidad o el porcentaje de alcohol de las bebidas.
Además, el consumo moderado de alcohol, señalado como de una a siete unidades de alcohol a la semana, no demostró tener ningún efecto protector sobre la estructura o función cerebral. Estudios anteriores han señalado que tomar alcohol moderadamente, más que abstenerse de él, podría proteger el cerebro, pero los investigadores de Oxford refutan esta hipótesis.
“El efecto protector observado podría deberse a factores de confusión, ya que nosotros no encontramos una asociación positiva entre la ingesta de alcohol y el coeficiente intelectual”, escribieron en el estudio publicado por el British Medical Journal. Además, factores como tomar alcohol y la edad avanzada pueden desencadenar padecimientos neurodegenerativos como el Alzheimer.
“Nuestros hallazgos respaldan la reciente reducción de los límites de seguridad (de consumo de alcohol) en Reino Unido y cuestionan las pautas actuales de Estados Unidos que sugieren que hasta 24.5 unidades por semana es seguro para los hombres, pues encontramos aumento de las probabilidades de atrofia del hipocampo con sólo 14-21 unidades por semana”, señalaron los investigadores y concluyeron: “No encontramos apoyo para un efecto protector del consumo moderado en la estructura del cerebro”.