La República Dominicana es pionera en la implementación de programas de inducción a docentes de nuevo ingreso en América Latina, política pública que está siendo asumida por dichos países, lo que revela que esta región asiste a cambios importantes en sus sistemas educativos.
Así lo expresó la doctora Denise Vaillant al ofrecer, de manera virtual, la conferencia “Los Programas de Inducción en América Latina: Bases para una nueva profesionalidad docente”, realizada en el marco del cierre pedagógico de la segunda edición del Programa Nacional de Inducción a Docentes de Nuevo Ingreso.
El programa es desarrollado por el Ministerio de Educación (Minerd) a través del viceministerio de Acreditación y Certificación Docente y del Instituto Nacional de Formación y Capacitación del Magisterio (Inafocam), y cuenta con el apoyo técnico del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC) y del grupo IDEA de la Universidad de Sevilla.
La doctora Vaillant dijo que el programa se ha convertido en un ejemplo para el resto de América Latina de como la inducción a educadores de nuevo ingreso al sistema educativo se puede convertir en una política pública que sea asumida oficialmente como la primera fase de la carrera docente.
Explicó por qué es importante de que sea asumido como una política pública. “Comenzar a ejercer la docencia es una actividad altamente compleja. Las actitudes, el comportamiento, la cultura del trabajo del docente, se gesta en estos primeros años. En esta etapa se marca la vida profesional futura del docente que puede extenderse por 30 o 40 años”.
“Lo segundo a destacar es que, las investigaciones demuestran que los países que implementan procesos de inducción inicial a la carrera docente, comienzan a experimentar mejoría en la calidad de los procesos pedagógicos que se desarrollan en los centros educativos”.
Dijo que estos cambios en la educación necesitan de muchos años para hacerse visibles por lo que hay que esperar que en dominicana transcurran de 10 a 15 años para que los resultados de la inducción puedan verse.
“Obviamente esto resultados han sido así en los países que los programas han sido diseñado y ejecutado con calidad’, agregó la expositora quien es de nacionalidad uruguaya, doctora en educación, investigadora y autora de diversos libros relativos al tema docente.
En respuesta a porqué es necesaria la inducción docente expresó “Esto se debe a que la formación inicial tiene debilidades. Incluso cuando esta es de alta calidad, el docente requiere de un apoyo en las situaciones de trabajo que muchas veces son nuevas para él por qué la formación inicial no puede preverlo todo, un ejemplo de esto es la situación actual de pandemia que afecta a todos los países”.
Sostuvo, asimismo, que la formación inicial de los docentes, sustentada en conocimientos y prácticas docentes son siempre insuficientes para responder a los desafíos que le impone la formación de niños y jóvenes en las escuelas.
“Puede que encuentre un docente experimentado que comprenda la situación de este y le dé un impulso para que pueda nadar, en otro caso se hunde en una cultura que le resulta ajena” argumentó la especialista uruguaya.
Respecto a las situaciones que se deben evitar en el proceso de implementación de la inducción docente, una de ella es el de no reconocer los aportes de los nuevos educadores que llegan a los centros educativos con ideas innovadoras.
“Estas con frecuencia no son tomadas en cuenta por quienes los dirigen en las escuelas: es necesario entonces darles voz a los nuevos docentes y reconocerles sus aportes”, precisó
Dijo, además, que las autoridades educativas dominicanas deben evitar lo que ocurre en otros países, donde a los nuevos docentes lo tienen en prueba cuando en realidad están en el proceso de aprendizaje de la cultura que se desarrolla en los centros educativos
Otro llamado de alerta, y que se aplica en otros países que ha estudiado, es evitar la confusión de los roles de formación y de evaluación. En ese sentido, explicó que los mentores solo tienen el rol de formación en dicho proceso educativo.