Otro matadero, en esta ocasión en el estado federado de Renania del Norte-Westfalia, se ha convertido en el epicentro de un nuevo brote de Covid-19 en Alemania con 675 positivos, según los resultados de las pruebas PCR a cientos de trabajadores.
La empresa, que cuenta con zona de sacrificio y planta de empaquetado, detectó el primer positivo la semana pasada, tras lo cual se comprometió a tomar medidas de higiene extraordinarias y ha realizado 983 test hasta el momento, dos tercios de los cuales han dado positivo.
No es el primer brote de Covid-19 que ocurre en Alemania en plantas de productos cárnicos. A primeros de mayo, las autoridades sanitarias detectaron en un matadero del estado federado de Schleswig-Holstein 130 positivos entre los trabajadores y sus familiares, mientras que en otro matadero de Baden-Württemberg se computaron 450 en unas instalaciones con 1.100 trabajadores.
El Instituto Robert Koch (RKI), encargado de supervisar la pandemia, valora estos brotes sin dramatismo. Se trata de brotes puntuales que, pese a su incidencia en las estadísticas, no implican un rebrote de la pandemia.
El ministro de Sanidad, Jens Spahn, pidió el mes pasado a sus colegas regionales que elaboren un protocolo específico para los mataderos para evitar nuevos focos y crear inseguridad en la cadena alimenticia.