El informe de esa organización –cuyas estadísticas han sido utilizadas por la Casa Blanca para sus decisiones migratorias– descubrió que el 63 por ciento de los hogares de personas que no son ciudadanas terminan recibiendo asistencia social, mientras que solo el 35 por ciento de los hogares estadounidenses nacidos en el país las utilizan.
El informe muestra que en hogares de no ciudadanos con hijos, es decir niños estadounidenses, el uso del bienestar se dispara a 79.6 por ciento.
Trump agregó que si bien cree que algunas industrias necesitan más trabajadores en diversas capacidades, los demócratas y la izquierda están presionando para que todos ingresen al país sin importar las consecuencias.
Actualmente, la oficina de Servicios de Ciudadanía e Inmigración (USCIS) revisa la propuesta de carga pública, luego de recibir comentarios públicos.