Por: Pedro F. Frisneda
Las ‘hookahs‘ o pipas de agua se han hecho muy populares en los últimos años en la ciudad de Nueva York, especialmente entre los jóvenes, y por eso las autoridades de Salud lanzaron este lunes su primera campaña para educar a los neoyorquinos sobre los peligros de usar estos productos.
Los nuevos anuncios publicitarios del Departamento de Salud de la ciudad de Nueva York (DOHMH), advierten que “solamente una hora fumando hookah expone a una persona a tanto monóxido de carbono y alquitrán como si fumara 10 cigarrillos”.
Además, señalan los anuncios, cualquier persona que se encuentre en una habitación donde se esté fumando hookah está expuesta a químicos tóxicos, sin importar si está fumando o no.
Lo más preocupante es que de acuerdo a datos del DOHMH, en 2016 el 11.7% de los estudiantes de la escuela intermedia y secundaria en Nueva York informó que había fumado hookah. Y son los latinos uno de los grupos de jóvenes que mostraron un aumento significativo en el uso de hookahs entre 2008 y 2016, pasando del 7.1% a 17.3%, seguido por los afroamericanos (de 3.2% a 7.1%).
Entre los estudiantes de la escuela intermedia también se registró un aumento (de 2.9% a 5.6%), según las cifras del DOHMH.
“Muchas personas subestiman los riesgos para la salud del hookah. Esta campaña en los medios ofrece la verdad sobre el humo de la hookah: es peligroso y dañino “, dijo la comisionada de Salud, la doctora Mary T. Bassett“.
De acuerdo al DOHMH, una hookah usa carbón ardiendo para calentar la shisha, una mezcla aromatizada de substancias a base de hierbas. Y, aunque algunas hookahs no contienen tabaco, el tabaco es un ingrediente popular y común en la shisha, por ello las autoridades de Salud advierten que ésta no es una “nunca” una alternativa saludable a los cigarrillos, independientemente de su contenido de tabaco.
El DOHMH indica que los químicos tóxicos asociados con fumar en la hookah provienen de dos fuentes: el carbón que se quema para calentar la shisha y la shisha misma. Muchos de los químicos no saludables (PDF), como el monóxido de carbono, el alquitrán y el formaldehído, que se desprenden de las hookahs, también se encuentran en el humo del cigarrillo. Además, se asegura que el agua no filtra eficazmente estos químicos del humo de la hookah. Y, cuando la shisha contiene tabaco, el humo contiene nicotina, que es adictiva.
“El reciente aumento en fumar hookahs amenaza el progreso que hemos logrado aquí en la ciudad de Nueva York para reducir el consumo de tabaco y prevenir miles de enfermedades y muertes relacionadas con el tabaco”, dijo la doctora Bassett.
Nuevas leyes en vigencia
Leyes aprobadas por la Ciudad de Nueva York, y que entrarán en vigencia este año, regulan el uso de la hookah, requiriendo que todos los establecimientos donde se fuman estas pipas obtengan un permiso y desplieguen carteles de advertencia sobre los riesgos para la salud ocasionados por el humo de la hookah.
Según la ley “Smoke-Free Air Act“, sólo aquellos establecimientos que obtuvieron por lo menos la mitad de sus ingresos brutos gracias a la venta de hookah sin tabaco, hasta el 16 de octubre de 2017, son elegibles para obtener un permiso.
El DOHMH informó que las solicitudes para obtener esos permisos se aceptarán hasta el 22 de octubre de 2018. A partir del 14 de abril d 2019, quedará prohibido que las tiendas minoristas y otros establecimientos vendan o sirvan shisha a menores de 21 años de edad.
De igual manera, a partir de octubre, no se permitirá la entrada de menores de 21 años a establecimientos donde se fume hookah.
Las nuevas leyes también aumentarán las sanciones para los establecimientos que ofrezcan shisha con tabaco, lo cual ya es ilegal en la ciudad.
Las autoridades de Salud advierte que los químicos en el humo de la hookah pueden aumentar su riesgo de:
- Ataque al corazón.
- Disminución de la función pulmonar.
- Síntomas respiratorios.
- Cáncer.
- Muerte prematura (para personas con enfermedades cardíacas y pulmonares).
Para obtener más información sobre los peligros de la hookah, visite nyc.gov/health/hookah.