Por. José Pimentel
Monción, Santiago Rodríguez.- Munícipes de lo que una vez se llamara villa de los pinares, llevan años exigiendo que se les construya un acueducto de agua potable o que por lo menos se les empalmen del acueducto de la Línea Noroeste que nace en este pueblo humilde y productivo.
Pareciera que una tierra bendecida por Dios en cuyo territorio existen dos grandes fuentes de agua (La presa de Monción y El Contra Embalse de la presa) sus moradores tengan que utilizar su capital para comprar agua para el consumo humano. Mientras a cientos de kilómetros como lo es Montecristi y casi toda la Línea Noreste se benefician del agua de esta presa.
En barios intentos por resolver dicha problemática los Residentes del municipio han alzado su voz ante la mirada indiferente de las autoridades competentes sin ser éstos escuchados.
Cabe destacar que en estas tierras se produce el 45%de los pollos que se consumen en el Cibao, así como el 85% del casabe que se consume en el país y gran parte del extranjero, del mismo modo sus lugareños tienen un arte inconfundible en la fabricación de muebles de madera preciosa.
Ahora bien, basta con un recorrido por este hermoso lugar bendecido por la naturaleza pero olvidado por las autoridades para percibir la belleza natural que posee.
Los munícipes de tan hermoso lugar pero olvidado por las autoridades aun siguen en espera de repuestas.
Solo cabe hacerse la siguiente pregunta, a caso no tienen ellos derecho de beneficiarse del agua de su propia presa?
