Por: Yanessi Espinal
La imagen del gobierno de Medina se ha deteriorado y los altos índices de popularidad del presidente han bajado
Una nueva reelección del presidente Danilo Medina ha vuelto a la palestra pública, pero en las circunstancias actuales al menos seis factores dificultan esa propuesta. Se trata del factor sorpresa que caracterizó su reelección anterior, la baja en su popularidad, el desgaste del gobierno, los escándalos de corrupción, la resistencia en el PLD y la oposición unificada y enfocada.
El factor sorpresa
1 Debido a que el presidente Medina mantuvo una negativa pública e incluso llegó a desautorizar públicamente a los promotores de su reelección entre los años 2012 y el 2015, no fue foco de ataque de los sectores que se oponen al Partido de la Liberación Dominicana (PLD). También lo benefició el discurso antirreeleccionista que había enarbolado desde el 2007 cuando compitió en el PLD por la candidatura presidencial contra Leonel Fernández. Sin embargo, ahora la realidad es otra, pues a pesar de que el presidente juró ante Dios que la del 2016 sería su última candidatura presidencial, en el PLD y fuera de ese partido la incertidumbre de que la reelección se vuelva a repetir sigue viva. De hecho, funcionarios allegados al gobernante como José Ramón Peralta y el dirigente Félix (Felucho) Jiménez han dicho que Medina no se reelegirá.
Baja en la popularidad
2 Aunque el presidente Danilo Medina mantiene niveles de aprobación altos de su gestión de gobierno, se ha registrado una baja considerable con relación a su primer periodo. Según la encuesta Gallup en enero y julio de 2015 el nivel de aprobación a la administración de Medina llegó al 82%; en febrero y mayo de 2014 llegó hasta el 87% y 89% y en agosto de ese año alcanzó 91.3%. En el 2017, Gallup ha publicado dos encuestas sobre la popularidad del gobierno de Medina, en febrero la cifra fue de 62.7% de aprobación y la última publicada el 2 de noviembre de este año bajó a 51%.
Casos de corrupción afectan imagen
3 Hasta septiembre del 2015, cuando ya había pasado todo el proceso de reforma a la Constitución y el presidente Medina era el candidato del PLD, no hubo ningún escándalo de corrupción. Ese escenario empezó a cambiar con el suicidio del ingeniero David Rodríguez en la sede de la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (OISOE). Posteriormente estalló el escándalo de Odebrecht, le siguieron los casos de Los Tres Brazos, la muerte de tres personas originada en irregularidades en el Consejo Estatal del Azúcar (CEA), Inapa y el último fue el de la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (Omsa). En total, el presidente ha tenido que cancelar 8 funcionarios por casos de corrupción y desde el 2015 van cinco muertes originadas en irregularidades en instituciones del Estado.
Además, según la encuesta del Estado Enhogar 2015, la corrupción ocupa el tercer puesto entre los principales problemas que preocupan a la ciudadanía. De hecho, el tema dio origen al movimiento social Marcha Verde, que hasta ahora ha sido el que ha dado mayor dolor de cabeza a la administración de Medina.
Más resistencia en el PLD
4 Aunque Medina mantiene a su favor los integrantes de los principales órganos del PLD, el Comité Central y el Comité Político, la situación a lo interno del PLD para Medina ha cambiado mucho. El sector de Leonel Fernández y el propio expresidente, parece que no están dispuestos a permanecer pasivos frente a las acciones de sus oponentes internos. Fernández ha escogido un estilo muy particular de responder a través de sus escritos del periódico Listín Diario a las acciones que parecen dirigidas a afectar su figura. Además, Franklin Almeyda, uno de sus más cercanos colaboradores, ante cualquier asomo de maltrato a la figura del expresidente sale al frente a sus detractores internos. En eso han logrado que se cumpla al menos parcialmente, los acuerdos internos, como ocurrió en la Cámara de Diputados.
Desgaste del gobierno
5 El presidente Medina lleva poco más de cinco años seguidos de gobierno y su segundo mandato apenas tiene algo más de un año. Sin embargo, el desgaste natural de las administraciones parece que empieza a afectar al gobierno. Por ejemplo, las visitas sorpresa que tanto apoyo han generado a la gestión, en la opinión pública han perdido impacto. Igualmente, la estrategia de comunicación del gobierno que al principio le dio resultado, ahora luce al revés. Recientemente la Sociedad Dominicana de Diarios emitió una queja debido a la negativa de los funcionarios del gobierno de responder a preguntas con los periodistas.
La denuncia llegó hasta la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP). Entre los aspectos que puedan calificarse como puntos débiles del gobierno, figuran el sector salud y la seguridad ciudadana. Recientemente, el gobierno sufrió una derrota en el Colegio Médico, uno de los gremios más importantes y que ejerce mayor presión contra el gobierno.
La oposición unificada y enfocada
6 Uno de los argumentos de los peledeístas que apoyaron la modificación a la Constitución para la reelección del presidente Medina es que Leonel Fernández unificaba la oposición. El tiempo demostró lo contrario, por primera vez desde la era del PLD en el poder, los contrarios al PLD se unificaron para enfrentarlo.
Además, contrario a lo que ocurrió en el periodo 2012-2016, la oposición se enfocó en atacar a Leonel Fernández, lo que favoreció a Medina. Ahora no es así, diez partidos de oposición han formado el denominado Bloque Opositor, que tiene a Medina como blanco de ataques. Además en el primer periodo de Medina la división del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) ocupó la atención política de los sectores contrarios durante casi tres años, ahora el PRM está enfocado en hacer críticas férreas contra el gobierno y hasta el momento, Hipólito Mejía y Luis Abinader, sus principales líderes, no han enfrentado mayores dificultades internas. A eso se suma la sociedad civil, con entidades como la Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus) y Participación Ciudadana, que ante la puesta en la palestra pública de la posibilidad de que Medina se reelija con reforma o sin reforma constitucional, salieron al frente a decir que el debate es inoportuno.
El debate lo puso el expresidente de la Suprema Corte de Justicia, Jorge Subero Isa, quien afirmó que el presidente Medina se puede reelegir con o sin reforma constitucional. Subero afirma que el Constitucional podría habilitar la reelección bajo el principio de igualdad.
Presidente Medina no necesita seguir
El pasado jueves, el ministro administrativo de la Presidencia, José Ramón Peralta dijo que Medina se reeligió para terminar varios proyectos. “Vimos que ninguno de los políticos de nuestro partido, ni de la oposición validaban esos proyectos, entre ellos, las estancias infantiles, centros de diagnóstico, una cantidad de proyectos que nunca se habían hecho en el país, ningún político lo valoraba como algo positivo, ni que le iba a dar continuidad. Nosotros no lo podíamos permitir, que esos proyectos, que son la insignia de este Gobierno, se quedaran sin terminar”, argumentó. Dijo que el gobierno no está “en politiquería”.