El director ejecutivo de la Federación Nacional de Bancas (Fenabanca), Michel Dicent, manifestó que debido a que en el país hay 30,750 bancas que operan de manera legal en el mercado, ese sector aporta unos 70,000 puestos de trabajo formales.
Al responder a Diario Libre, el dirigente empresarial dijo que cada banca de lotería tiene en promedio dos secretarias o cajeras.
Con respecto al aporte que actualmente hacen las bancas al fisco, Dicent expresó que si se hace un análisis del año 2011 hasta la fecha, se podrá notar que los ingresos fiscales por este concepto han estado disminuyendo considerablemente.
“La proyección era unos 2,000 millones de pesos de impuestos aproximadamente y según los últimos informes anda por menos de los 1,000 millones de pesos”, indicó.
Desde una perspectiva sociológica, el director de Flacso-RD, Iván Ogando, cuestiona el aporte real de las bancas de lotería que, a su juicio, es mínimo en las comunidades donde operan.
“El crecimiento del número de bancas de apuestas en nuestro país ha sido desproporcionado. Han llegado a constituirse en un sector muy influyente políticamente debido a que generan ingresos fiscales considerables y también empleos de baja calificación. Sin embargo, la mayor parte de estos beneficios, en general, son a costa de los grupos socioeconómicos que precisamente tienen menos ingresos”, plantea
Para Ogando, las bancas, en sentido general, tienen un impacto positivo muy limitado en las comunidades en que operan, puesto que las rentas van a manos de los propietarios.
En tal sentido, cuestiona la medida adoptada por el Ministerio de Hacienda, pues considera que contribuirá a aumentar el número de bancas y, a su vez, fomentaría más el juego y sólo perjudicaría los ingresos de amplios sectores sociales que buscan en los juegos de azar el sueño para salir de su situación económica.