Error
  • La plantilla no está disponible para esta presentación. Por favor, contacte con un administrador del sitio.

Así sería el único ser humano capaz de sobrevivir a un accidente de tránsito letal

A primera vista parece un ser monstruoso.

Tiene un cráneo enorme, la cara achatada, la nariz recortada, las orejas deformes y una suerte de sacos que sobresalen entre costilla y costilla.

Se llama Graham y, según sus creadores, es la única persona cuya constitución física está diseñada para permitirle sobrevivir a un accidente de tránsito letal.

Este ser imaginario fue creado por una iniciativa de la Comisión de Accidentes de Transporte (TAC) de la región australiana de Victoria, con la participación de un cirujano experto en traumas, un experto en accidentes de tránsito y una artista plástica, que tuvieron con misión recrear la imagen de cómo debería lucir un ser humano si debiera evolucionar para sobrevivir a un accidente automovilístico.

"Los vehículos han evolucionado a una velocidad mucho mayor que los humanos y Graham nos ayuda a entender por qué es necesario mejorar cada aspecto de nuestro sistema vial para protegernos de nuestros propios errores", explicó en una nota de prensa el director de TAC, Joe Calafiore.

Cada una de las características del físico de Graham que son distintas al ser humano tradicional están diseñadas como un recordatorio de las vulnerabilidades que tenemos ante un accidente.

Así, por ejemplo, su cabeza es enorme porque su cráneo es de mayor tamaño para poder proteger mejor al cerebro de los impactos; no tiene cuello, para disminuir los riesgos de daño a la médula espinal; su cara es aplanada y grasosa y tiene unos saquitos entre las costillas para disminuir el impacto de un choque; etc.

Con Graham, las autoridades de TAC buscaban crear una herramienta didáctica que les permitiera abordar el tema de la seguridad vial desde una perspectiva inédita.

La instalación estará en exhibición en el Biblioteca Estatal de Victoria hasta el 8 de agosto, antes de ser enviada de gira por el país.

Además se ha creado una página web (www.meetgraham.com.au) y se ha modificado el plan de estudio de las escuelas para que los alumnos puedan aprender más sobre el tema.

Su mensaje, sin embargo, irá más allá de Australia, pues la historia de Graham se ha hecho viral y ya está llegando a otras partes del mundo.