SANTO DOMINGO. Si la contraseña que utilizas para tu correo, redes sociales o realizar transacciones bancarias, es una palabra que figura en el diccionario... deberías considerar cambiarla.

Así lo afirma el experto en seguridad cibernética, Carlos Méndez Comas, quien señala que, así como las tecnologías anti-hackers van avanzando, también lo hacen los métodos de hackeo, y por eso el elemento vital para no ser una víctima más, es ser precavido al momento de usar tu celular con redes wifi desconocidas y el internet en tu computadora.

Las informaciones de seguridad fueron expuestas dentro del marco de conferencias del Instituto Dominicanos de la Telecomunicaciones (Indotel) en la XIX Feria Internacional del Libro Santo Domingo 2016, bajo el nombre “Cómo evitar ser víctima de fraudes por la internet”, en donde los presentes fueron alertados de los diferentes tipos y métodos que se utilizan para robar dinero e información a una persona vía internet.

Entre los mecanismos que emplean los denominados hackers para cometer sus delitos informáticos, el especialista mencionó:

Pharming: infecta la computadora haciéndole creer que entró al website de X banco, cuando realmente está en un sitio malicioso, facilitando su nombre de usuario y contraseña.

Phishing: envío de un correo electrónico o una llamada a nombre de X entidad bancaria pidiendo algún tipo información personal.

Smishing: envío de mensaje de texto solicitando que entres a X página web o llames a un número en donde también tendrás que suministrar datos personales.

Otros métodos que no necesariamente requieren internet son:

Mula: Hacer un retiro de X cantidad para reenviárselo a la persona pero por otra vía.

Cambiazo: Cuando te cambian la tarjeta por otra. Muy común en cajeros, especialmente cuando estos aparentan estar dañados y alguien te pide “ver tu tarjeta”.

Timbrazo: Cuando realizas retiro de una alta suma de dinero en un banco y alguien dentro del mismo le avisa a un tercero fuera.

Durante la conferencia, Méndez Comas también habló acerca de las contraseñas e hizo una seria advertencia, luego de que algunos de los presentes respondieran ante la pregunta, si usan claves solo de número, ya que este tipo de “password” o contraseñas son las más fáciles de descifrar y a penas toma unos segundos hacerlo. Añadió que, aunque no es cien por ciento seguro, lo ideal debería ser una mezcla de números y letras (alfanumérica) y algún carácter especial como el “punto”.

Aclaró que aunque algunos bancos en sus cajeros usan claves de cuatro dígitos, estos no son vulnerables debido al bloqueo que genera el cajero, si la clave es puesta incorrectamente unas tres veces.

El también desarrollador de aplicaciones y páginas web, detalló otras formas en que también se puede ser víctima de fraudes, y citó el ejemplo de que usted puede estar haciendo una transacción bancaria vía internet y abrir una pestaña hacia otro sitio web, y a través de ese sitio un hacker se puede filtrar por las pestañas a la página del banco y cometer el delito.

El tecnólogo alertó además, sobre el método de robo de identidad, que consideró como el más “letal”, ya que le roba “hasta lo que usted no tiene”. Pero ¿cómo funciona? Méndez Comas explicó que es un robo sofisticado pero común, ya que es orquestado por individuos que estudian a su víctima sin darse cuenta, aprendiéndose su forma de firmar, su forma de vestir, obtienen su cédula, e imitan su parentesco físico, para luego sacar un préstamo en una entidad bancaria y desaparecerse, quedando usted con la deuda encima.

Algunas recomendaciones

No usar redes wifi desconocidas o pública, porque vuelve al dispositivo vulnerable ya que a través de la red, se pueden filtrar en tu celular y sacar información.

No revisar cuentas de bancos ni realizar compras por internet desde cualquier computadora, siempre es mejor desde su computadora personal.

Prestar mucha atención al website del banco que ingresas debido a que a veces, pudiera no ser el real.

No ser ostentoso por las redes sociales, debió a que esto te vuelve vulnerable ante información necesaria.

No instalar programas desconocidos o “pirateados”.

No crear cuenta de bancos por otra persona.Tratar de ir a los mismos cajeros automáticos, ya que así es más fácil darse cuenta de algo sospechoso.

Estar pendiente a las tarjetas de crédito en casos como cuando se echa gasolina por lo fácil que resulta clonar una tarjeta. Y por último, el especialista terminó recordando que “El dinero fácil no existe, sea cauto antes de dar información”.